Esta es la tarta que preparamos este año para celebrar el Día del Padre. Es muy fácil de preparar, queda muy vistosa y, además, está de vicio :).
Para la base hemos utilizado una receta muy parecida a la que utilizamos para las quiches (como ésta que publicamos hace un tiempo), sólo que con poco de azúcar y algo más de mantequilla; para el relleno, nuestra crema pastelera de siempre; y, para decorar, nuestras frutas favoritas: fresas, mango y kiwi.
Esperamos que os guste tanto como a nosotras :)
Ingredientes:
Para la base:
- 150 g. de harina
- 50 g. de azúcar
- 100 g. de mantequilla
- 1 yema + 1 cucharada de agua
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Para la crema:
- 1/2 litro de nata
- 120 g. de azúcar
- 50 g. de maicena
- 4 yemas de huevo
- 1 ramita de canela
- cáscara de limón y naranja
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Para decorar: fresas, mango y kiwi.
¿Cómo lo hacemos?:
Para la base: ponemos en un bol la harina y el azúcar. Añadimos la mantequilla fría cortada en cubitos y frotamos con los dedos hasta obtener miguitas. Añadimos la yema, el agua y la vainilla y amasamos muy bien con las manos. Formamos una bola, la envolvemos en papel film y la dejamos en la nevera unos 15-20 minutos para que tome consistencia.
Pasado este tiempo, ponemos la masa sobre una superficie enharinada y extendemos con el rodillo hasta que quede bien fina. Las pasamos con ayuda del propio rodillo al molde que vayamos a utilizar y la colocamos bien con las manos. Recortamos el exceso de masa y pinchamos el fondo varias veces con un tenedor.
Colocamos sobre el fondo un trozo de papel de horno y, sobre éste, un puñado de garbanzos. Metemos al horno precalentado a 180ºC durante 20 minutos. Retiramos el papel y los garbanzos y volvemos a meter al horno otros 5 minutos. Sacamos del horno y dejamos enfriar por completo.
Para la crema pastelera: seguimos el mismo proceso de siempre (aquí podéis ver cómo se hace) y la dejamos enfriar cubierta con un trozo de papel film.
Para el montaje: colocamos la base sobre el plato de presentación, vertemos dentro la crema pastelera y la extendemos con cuidado con ayuda de una espátula o cuchara. Decoramos con los trocitos de fruta como más nos guste ¡y listo!.
Que bonita ha quedado y encima tiene que estar super buena. Seguro que el papi se sintió muy orgulloso. Un besote y feliz fin de semana!
ResponderEliminarte ha quedado estupenda!! estas frutas de temporada le dan mucho color
ResponderEliminarbss
Qué tarta tan bonita y lo deliciosa que tiene que estar. Un abrazo, Clara
ResponderEliminarQué maravilla de tarta!!! os ha quedado deliciosa, preciosa y muy colorida, me encanta!! es muy primaveral, se ve ESPECTACULAR!! Besotes
ResponderEliminarElena
Que pintaza tiene esta tarta!! me encantan con crema y fruta y esta esta que se sale de buena, madre mia que bien os ha quedado, esta de escaparate,no hay nada mejor que un dulce casero, y a la vista esta esta joya de tarta...Bess
ResponderEliminarBonita , deliciosa, bien presentada,,,Para mí perfecta para este fin de semana!!un beso guapa
ResponderEliminarEstas tartas cargadas de frutas son pura delicia, además te ha quedado preciosa y segura estoy de que riquísima! bss
ResponderEliminarHolaaaa, que preciosa tarta de frutas! madre mía que colorido, y sin duda riquísima. La crema pastelera casera me pierde.
ResponderEliminarUn besoooo
Te ha quedado una tarta preciosisima
ResponderEliminarY es facilísima!!
Y tenía que estar...
Besetes de Cecilia de Un Postre Para Pantagruel