Pan de molde integral con semillas (+ truco para conservarlo durante semanas)

 ¡Buenas! Hoy os traemos una receta estupenda para que podáis hacer en casa vuestro propio pan de molde tierno y esponjoso y, lo mejor de todo, el truco para conservarlo durante semanas como el primer día.

 

Nosotras hemos utilizado una parte de la harina integral, pero podéis hacerlo con harina común únicamente si lo preferís. También le hemos añadido semillas y copos de avena (y pipas, la primera vez que lo hicimos) aunque, podéis ponerle cualquier otra cosa, o nada si así lo queréis. De cualquier forma, seguro que está riquísimo.

 

Es la misma masa que utilizamos para hacer los bollitos preñaos, para los panes de hamburguesa y también, muchas veces, para la pizza...¡y es que sirve para todo!, comprobado :). Se prepara en 5 minutos (aunque luego necesitaremos tiempo para el levado) y sólo necesita 30 minutos de horno. Y tendremos un pan de molde casero, sin conservantes, ni colorantes ni nada por el estilo.

 

Os dejamos con la receta y, al final, ¡truco!

 

Ingredientes (para 1 pan):

 

- 250 g. de harina blanca

- 250 g. de harina integral

- 2 cucharaditas de sal

- 200 ml. de agua tibia

- 25 g. de levadura fresca (ó 8,5 g. de levadura seca de panadería)

- 50 ml de aceite de oliva virgen extra

- 2 huevos + 1 extra para pintar

- 1 puñado de copos de avena

- 1 puñado de semillas (sésamo, lino, pipas...)

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Ponemos en un bol pequeño el agua y disolvemos en ella la levadura. Reservamos durante 5 minutos.

 

Ponemos en un bol amplio las harinas, la sal, los copos de avena y la semilla. Mezclamos bien y reservamos.

 

Añadimos al bol con el agua y la levadura, los huevos y el aceite y mezclamos muy bien con un tenedor. Vertemos sobre mezcla de harinas y semillas y removemos con un tenedor o una cuchara de madera hasta que podamos trabajar con las manos (quedará una masa bastante consistente). Amasamos durante unos 4-5 minutos, damos forma de bola a la masa y la dejamos reposar en un lugar cálido, cubierta con un paño limpio, durante 1 hora.

 

Pasado este tiempo, quitamos el aire a la masa, formamos una bola de nuevo y la cortamos en 4 trozos iguales. Hacemos una bolita con cada trozo y las colocamos, unas junto a otras, en nuestro molde (previamente cubierto con papel antiadherente y engrasado con un poco de aceite). Cubrimos de nuevo y dejamos reposar 1 hora más.

Pasado este tiempo, pintamos la superficie con el huevo batido y metemos al horno precalentado (importante) a 200ºC, en la parte baja del horno, durante 30-35 minutos (podemos pinchar en el centro para comprobar si ya sale limpio).

 

Sacamos del horno y dejamos enfriar un poco ante de desmoldar. Dejamos enfriar completamente antes de cortar, ¡y listo!.

 

Y ahora, el truco :). Para tener pan como nuevo durante semanas, sólo tenéis que cortarlo en rebanadas (siempre con un cuchillo de sierra), guardarlo dentro de una bolsa de plástico y ¡al congelador! Cuando os apetezca una tostada, sólo tenéis que coger la rebana y meterla en la tostadora (directamente del congelador) y ¡estará como recién hecha!. Yo la suelo meter un par de veces porque me gusta que quede doradita pero, con una vez es suficiente. El truco se lo copiamos a Isasaweis y, la verdad es que funciona muy bien.

 



Tronco de tiramisú

¡Hola! Hoy traemos nuestro postre para Nochebuena. Hicimos una versión del tradicional tronco de Navidad con sabor a tiramisú...¡y fue todo un éxito! La crema de mascarpone con la que lo rellenamos está increíblemente rica y tiene una textura perfecta tanto para rellenar troncos como éste, como para preparar milhojas, decorar tartas o rellenar cualquier pastelito. Esperamos que os guste tanto como a nosotras :)

 

Ingredientes:

 

Para la plancha de bizcocho:

 

- 3 huevos

- 80 g. de azúcar

- 1 pizca de sal

- 75 g. de harina leudante (o 75 g. de harina normal + 1 cucharadita de levadura Royal)

- 1 cucharadita de esencia de vainilla

 

Para el relleno y cobertura:

 

- 250 g. de queso Mascarpone

- 200 ml. de nata líquida

- endulzante al gusto (en nuestro caso, sirope de agave en vez de azúcar)

- 1/2 vaso de café

- 200 g. de chocolate negro

- 100 ml. de nata líquida

 

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Para la plancha de bizcocho: ponemos en un bol de cristal al baño María los huevos, con el azúcar y la sal. Batimos durante unos 8-10 minutos con las varillas eléctricas hasta que la mezcla blanquee y doble (e incluso triplique) su tamaño. Retiramos del fuego con cuidado, añadimos la vainilla y batimos un par de minutos más para que se enfríe un poco la mezcla. Añadimos la harina en dos veces y mezclamos con ayuda de una espátula, con movimientos envolventes, hasta que todos esté bien integrado.

 

Vertemos la mezcla en la bandeja del horno, con papel antiadherente en el fondo, y la inclinas hacia uno y otro lado para que la mezcla quede bien repartida por la bandeja. Metemos al horno precalentado a 180ºC durante uno 15 minutos, o hasta que al pinchar en el centro con un palillo, salga limpio. Sacamos del horno y retiramos las plancha de la bandeja, la colocamos sobre un paño limpio y enrollamos con cuidado. Reservamos hasta que se haya enfriado.

 

 

Para el relleno y cobertura: ponemos en un bol el queso Mascarpone junto con el sirope de agave (o cualquier otro endulzante al gusto) y reservamos. En otro bol, montamos la nata a punto nieve. Unimos ambas con ayuda de una espátula y, de nuevo, movimientos envolventes, hasta obtener una mezcla homogénea. Reservamos.

 

 

Para la cobertura de chocolate, ponemos en un bol el chocolate troceado y vertemos encima la nata bien caliente. Removemos hasta que quede bien homogéneo y reservamos. Mientras se templa la ganache, montamos el tronco.

 

 

Para el montaje: desenrollamos con cuidado la plancha de bizcocho y la empapamos bien con el café. Repartimos la crema de Mascarpone por toda la superficie y enrollamos con cuidado sobre sí mismo. Cortamos un trocito del rollo con un corte diagonal y lo colocamos junto a la pieza más grande para que parezca un tronco de verdad. Con ayuda de una espátula, cubrimos con la ganache de chocolate que habíamos preparado y dejamos que se endurezca ligeramente; entonces, con ayuda de un tenedor, le dibujamos unas líneas onduladas para darle un toque más realista. Reservamos en la nevera hasta la hora de servir.

 



Dulce de membrillo

El otro día os comentamos que todos los años hacemos dulce membrillo en casa, y hoy os traemos nuestra receta. Es muy sencilla, aunque lleva un poco de tiempo, y se necesitan muy pocos ingredientes. Cada año repetimos, porque además de que tenemos nuestros propios membrillos, nada tiene que ver el dulce que se hace en casa con el de compra :)

 

 

 

Ingredientes:

 

- 4 kg. de membrillo

- 1200 g. de azúcar

- 4 limones

 

 

¿Cómo lo hacemos?:

Lavamos muy bien los membrillos, los secamos con un paño limpio y los troceamos (desechando el centro). Es en este momento cuando debemos pesar 4 kg. de membrillo.

Ponemos en una olla amplia los trozos de membrillo, el azúcar  y el zumo de los 4 limones. Tapamos y dejamos reposar durante toda la noche.

Al día siguiente, ponemos la olla al fuego hasta que empiece a hervir; entonces, bajamos el fuego y dejamos que se cocine, removiendo de vez en cuando, durante 1 hora aproximadamente.

Pasado este tiempo, trituramos con la batidora y vertemos en los moldes donde vayamos a guardarlo (en nuestro caso, en tuppers medianos). Dejamos enfriar antes de tapar, ¡y listo!.

A nosotras, con estas cantidades, nos salieron 3 tuppers como el que veis en la foto.
 



Crumble de frutas de otoño (receta vegana)

¡Hola! Hoy os traemos un crumble vegano con manzana, orejones, y arándanos muy fácil de preparar y riquísimo...tanto, que en ésta semana ya lo hemos preparado dos veces...jajaja. Hemos querido hacer una versión más saludable de este famoso postre, para lo que hemos sustituido el azúcar, la mantequilla y la harina de trigo, por miel, aceite de oliva y avena. Nunca antes lo habíamos preparado pero, nos ha gustado mucho, sobre todo para tomar templadito en estos días más fríos. Espero que probéis a hacerlo, seguro que repetiréis :).

 

 

Ingredientes (para unas 5 personas):

 

- 4 manzanas Golden

- 4 manzanas reinetas

- 1 puñadito de orejones

- 1 puñadito de arándanos deshidratados

- 2 tazas de copos de avena

- 1 chorrito de miel (unas 2 cucharadas)

- 1 chorrito de aceite de oliva suave (unas 3 cucharadas)

- canela en polvo

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Pelamos y troceamos las manzanas y las cocinamos, junto a los orejones y los arándonos, hasta que estén bien blanditas. Podemos cocerlas o, como en nuestro caso, hacerlas al vapor durante unos 10 minutos. Cuando la fruta esté lista la colocamos en una bandeja mediana para horno, espolvoreamos con, un poco de canela en polvo y reservamos.

 

Trituramos ligeramente los copos de avena y los ponemos en un bol. Añadimos canela en polvo al gusto, la miel y el aceite y mezclamos con nuestras propias manos hasta que todo esté más o menos integrado y la mezcla quede más bien pegajosa.

 

Repartimos la mezcla anterior sobre la fruta, de modo que quede totalmente cubierta, y metemos al horno precalentado a 180ºC y con el grill puesto durante unos 10 minutos (hasta que el crumble esté doradito). Sacamos del horno y servimos templado (podemos añadir un poco de helado o yogur fresquito para que esté aún más rico).

 

 

 

Rollos de canela con sabor a tarta de zanahoria (receta vegana)

¡Hola! Seguro que much@s de vosotr@ conocéis los famosísimos Cinnamon Rolls (o rollos de canela). A nosotras nos encanta prepararlos en casa de vez en cuando (a veces clásicos con canela y otras veces, como esta otra receta que ya tenemos publicada en el blog, con Nutella). Pero hoy, os traemos él último tesoro que hemos encontrado en el mundo vegano: ¡Rollos de canela con sabor a tarta de zanahoria! ¿¿Puede haber algo más rico?? :)

 

Esta es una de las cosas más ricas que hemos preparado y disfrutado en mucho tiempo...son INCREÍBLES. Es una receta 100% vegana, deliciosa y muy fácil de hacer (aunque, como siempre que trabajamos con masas, necesitamos tiempo para que reposen). Quedan super blanditos y con un sabor muy especial, tan especial como el de la tarta de zanahoria :).

 

Espero que os gusten tantísimo como a nosotras y ¡no dudéis en hacerlos!

 

 

Ingredientes (para un molde de unos 20 cm):

 

- 1 taza de leche vegetal (en nuestro caso, de soja)

- 1 sobre de levadura seca de panadería

- 2 cucharaditas de azúcar (en nuestro caso, moreno)

- 1 cucharada de semillas de lino molidas + 3 de agua tibia

- 3 tazas de harina de espelta (o integral común)

- 2 cucharadas más de azúcar

- 1 cucharadita de levadura Royal

- 1 pizca de sal

- 1/4 de taza de aceite de oliva suave

- 1 cucharada de esencia de vainilla

- 3/4 de taza de zanahoria rallada

 

Para el relleno: 1/2 taza de mantequilla vegetal, 1/2 taza de azúcar, 2 cucharadas de miel, 1 cucharada de canela en polvo, 1 cucharadita de nuez moscada, 1 puñado de nueces troceadas y puñado de uvas pasas.

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Ponemos en un cuenco la lecha, junto con la levadura de panadería y las 2 cucharaditas de azúcar. Removemos y dejamos reposar 10 minutos.

 

Ponemos en otro cuenco las semillas de lino molidas, junto con las 3 cucharadas de agua tibia. Removemos y dejamos reposar también durante 10 minutos.

 

En un bol más amplio ponemos la harina, las otras 2 cucharadas de azúcar, la levadura Royal y la sal. Mezclamos bien y reservamos.

 

Cuando hayan pasado los 10 minutos, añadimos a la mezcla de leche: el aceite de oliva, la mezcla de semillas de lino y la esencia de vainilla. Mezclamos muy bien con un tenedor y vertemos la mezcla en el bol  donde teníamos la harina. Mezclamos muy bien con ayuda de una cuchara y cuando todo esté bien integrado, añadimos la zanahoria rallada. Mezclamos de nuevo.

 

La masa quedará bastante pegajosa, por eso debemos añadir un poco más de harina (poco a poco y amasando para que se vaya integrando). Cuando ya no se nos pegue a las manos, formamos una bola, la ponemos en un bol cubierto con un paño limpio y dejamos reposar durante 1 hora.

 

Mientras reposa la masa, podemos preparar el relleno. Para ello, simplemente debemos mezclar todos los ingredientes en un cuenco, con ayuda de las propias manos.

 

Tras la hora de reposo, colocamos la masa sobre una mesa bien enharinada y la estiramos con ayuda del rodillo para formar un rectángulo de 1/2 cm de grosor aproximadamente. Esparcimos el relleno por la superficie y, con cuidado, enrollamos la masa sobre sí misma. Cortamos el rollo en porciones de unos 2 cm de grosor y los colocamos, tumbados, en el molde (con papel de horno en el fondo). Cubrimos con un paño limpio de nuevo, y dejamos reposar durante 1 hora más.

 

Pasado este tiempo, metemos el molde al horno precalentado a 190ºC durante 20 minutos (podemos pinchar los bollos para asegurarnos de que el cuchillo sale limpio pasado este tiempo). Retiramos del horno y dejamos enfriar antes de desmoldar. Decoramos con unos hilos de chocolate negro fundido, un poco de ralladura de naranja por encima, ¡y listo!

 

 

* Si no tenéis todos los ingredientes para hacer esta receta, podéis hacer la versión no vegana sustituyendo la leche vegetal por leche de vaca, la mantequilla vegetal por mantequilla normal, y la mezcla de semillas de lino y agua por 1 huevo. ¡Quedarán igual de ricos seguro!



Natillas de manzana (con canela y frutos secos)

¡Hola de nuevo! Hoy os traemos una nueva receta vegana, en este caso, dulce. Unas natillas de manzana deliciosas y super saludables perfectas como postre, merienda o, incluso, desayuno. La receta es muy sencilla, y como ahora veréis, muy rapidita...así que, ¡lo tiene todo! :)

 

 

Ingredientes (para 6 personas):

 

- 2 manzanas reinetas

- 2 cucharadas de sirope de agave (o miel, en su defecto)

- 1 litro de leche vegetal (preferiblemente, de avena)

- 1 ramita de canela

- 2 cucharaditas de agar-agar

- esencia de vainilla (al gusto)

- canela en polvo y frutos secos para decorar

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Pelamos y troceamos las manzanas y las ponemos en una olla al fuego, junto con el sirope o miel. Cocinamos a fuego medio hasta que la manzana esté blandita.

 

Añadimos la leche, la ramita de canela y la esencia de vainilla. Removemos y dejamos que se cocine unos minutos más. A continuación, retiramos la ramita de canela, añadimos el agar-agar y trituramos muy bien todo con la batidora.

 

Vertemos la mezcla en copas o cuencos pequeños de cristal y dejamos que se enfríe y cuaje bien. Antes de servir, espolvoreamos con canela en polvo y frutos secos molidos o en trocitos.

Granola crujiente (con frutas deshidratadas, frutos secos y chocolate)

Para empezar la semana con buen pie, os enseñamos una receta estupenda para nuestros desayunos o meriendas que, además de ser super saludable, está de muerte.

 

Cuando comprobamos que la granola crujiente que comprábamos en el super llevaba más azúcar que otra cosa, buscamos la receta para poder hacerla nosotras mismas, sin azúcar ni conservantes químicos de ningún tipo.

 

Los ingredientes básicos son: copos de avena, 1 clara de huevo y miel y, a partir de ahí, podemos añadirle los que queramos...¡todo lo que se nos ocurra! Aquí os dejó una opción, la combinación que más nos gusta a nosotras pero, podéis ponerle más (aunque lo veo difícil...jajaja) o menos ingredientes, eso depende de vuestros gustos.

 

Espero que probéis a hacerla en casa porque, de verdad, que es un vicio de lo buena que está. Para nosotras, con yogur y un poco de fruta, como veréis ahora, es el desayuno o merienda PERFECTO :)

 

 

Ingredientes (el tipo y cantidad, van al gusto):

 

- Copos de avena (en nuestro caso, algo más de 1/2 kilo).

- 1 clara de huevo.

- 1 cucharada grande de miel.

- Nueces y almendras troceadas.

- Coco (rallado o en láminas).

- Semillas de lino y sésamo.

- Arándanos deshidratados, uvas pasas y dátiles troceados.

- Trocitos de chocolate negro.

- Canela.

 

¿Cómo lo hacemos?

 

Ponemos en un bol amplio los copos de avena, las nueces y las almendras troceadas, el coco y las semillas y mezclamos bien con las manos. En otro bol más pequeños, mezclamos la clara de huevo y la miel y la añadimos a la mezcla anterior. Mezclamos una vez más, con ayuda de una espátula o una cuchara.

 

Cubrimos la bandeja del horno con papel antiadherente y colocamos encima nuestra mezcla, repartiéndola bien por toda la superficie. Metemos al horno precalentado a 180ºC durante unos 10-15 minutos (dependerá de la cantidad que hayamos preparado), removiendo cada poco nuestra granola para que se vaya tostado uniformemente. Es importante que no se tueste demasiado, debe tener un ligero color dorado y debemos tener en cuenta que, al enfriarse, se quedará más crujiente de lo que está al sacarla.

 

Sacamos la bandeja del horno y dejamos que la mezcla se enfríe. Una vez fría, la pasamos un bol amplio y añadimos el resto de ingredientes: arándanos, uvas pasas, dátiles troceados, trocitos de chocolate y una pizca de canela. Mezclamos bien con las propias manos y guardamos nuestra granola en un recipiente con tapa.

 

Para daros una idea de cómo usarla, aquí podéis ver uno de esos desayunos/meriendas de los que hablábamos antes; en este caso, con capas de: yogur, manzana en cubitos, fresas cortadas en láminas, un puñadito de frambuesas y, por supuesto, nuestra granola. ¡RIQUÍSIMO!

 

 

Leche (o bebida) de avena

Siguiendo con las recetas veganas, hoy os traemos un nuevo descubrimiento: lo fácil, rápido y económico que es hacer bebidas vegetales en casa :). Para empezar, esta rica leche o bebida de avena, para la que básicamente necesitaremos 2 ingredientes: copos de avena y agua. Para darle más sabor, añadiremos también un poco de esencia de vainilla y edulcorante al gusto. Personalmente, nos gusta mucho más fría que caliente pero, para gustos los colores :).

 

Aparte de los ingredientes, sólo necesitareis una batidora común y un colador de tela. Esperamos que probéis a hacerla en casa y os guste tanto como a nosotras :).

 

 

Ingredientes (para 1,5 l. aproximadamente):

 

- 200 g. de avena

- 1 y 1/4  litro de agua (mineral, preferiblemente).

- Esencia de vainilla y edulcorante al gusto.

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Ponemos en un bol amplio el agua y la avena y dejamos reposar durante 30 minutos. Pasado este tiempo, trituramos bien con la batidora durante un par de minutos.

 

Colamos la mezcla a través del colador de tela, poco a poco y ayudándonos con una cuchara y con la propia mano, apretando para aprovecharlo al máximo. Nos llevará un ratito pero, ¡merece la pena! :). Volvemos a colar la mezcla para asegurarnos de que se queda lo más fina posible, añadimos la vainilla y el edulcorante al gusto y vertemos en una botella (de cristal, preferiblemente), con ayuda de un embudo, ¡y listo!

 

* Si vemos que se nos queda muy espesa, podemos añadir un poco más de agua pero, eso ya es al gusto de cada uno.

Tahín de sésamo y lino

La receta de hoy es una muy sencillita, que sólo necesita 3 ingredientes y 5 minutos en la cocina: el tahín o tahini, una especie de pasta o paté de sésamo muy rica y nutritiva que podemos utilizar a modo de "mantequilla" en tostadas o como aperitivo, siendo un ingrediente básico para el humus de garbanzos (que no tardaremos mucho en hacer).

 

Os enseñaremos la versión que más nos gusta, en la que se combinan el lino y el sésamo con un chorrito de aceite de oliva virgen extra.  También se puede hacer con agua en vez de aceite pero, en teoría, se conserva mejor si se hace con aceite. A nosotras nos encanta, con ese sabor que tiene que recuerda al de la crema de cacahuete, tanto en su versión dulce (con un puntito dulce y salado al mismo tiempo) como salada.

 

Espero que probéis a hacerlo en casa porque, además de rico y bueno, nos sale muchísimo más económico que el podemos encontrar en el super...¡Bueno, bonito y barato! :)

 

 

Ingredientes:

 

- 100 g. de semillas de sésamo.

- 100 g. de semillas de lino.

- Unos 100 ml. de aceite de oliva virgen extra.

- Para la versión dulce: 1 cucharadita de edulcorante.

 

¿Cómo lo hacemos?

 

Molemos bien las semillas y ponemos la mezcla hecha polvo en el vaso de la batidora. Añadimos un chorrito de aceite y batimos. Dependiendo de si lo queremos más o menos espeso, añadiremos más o menos aceite. Es el momento, si optamos por la versión dulce, de añadir el edulcorante.

 

Una vez los ingredientes estén bien integrados, pasamos la mezcla a un bol pequeño, ¡y listo!

 

 

Galletas de coco

Hoy, otra receta más con coco...porque nos encanta. Unas galletitas que se hacen en un momento y quedan muy ricas...comes una, ¡y ya no puedes parar! :)

 

Al igual que con el pastel de plátano del otro día, la receta la hemos sacado de un mini recetario que venía con la Maizena y que nos está gustando mucho, la verdad.

 

Esperamos que os gusten :)

 

 

Ingredientes:

 

- 125 g. de mantequilla (o margarina)

- 1/2 vaso de azúcar (90 g.)

- 1/2 vaso de harina (85 g.)

- 1/2 vaso de Maizena (85 g.)

- 1 cucharadita y media de levadura Royal

- 1 huevo

- 200 g. de coco rallado

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Ponemos en un bol la mantequilla fría cortada en cubitos, el azúcar, la yema del huevo, la harina, la levadura y el azúcar. Mezclamos bien con las manos.

 

Añadimos la clara de huevo batida y el coco rallado y mezclamos muy bien con las manos otra vez, hasta obtener una masa homogénea.

 

Hacemos bolitas más o menos del mismo tamaño, las aplastamos ligeramente y las colocamos sobre la bandeja del horno con papel antiadherente en el fondo.

 

Metemos al horno precalentado a 200ºC durante unos 15 minutos, hasta que estén un poco doraditas por encima. Sacamos del horno y dejamos enfriar.

 

 



Leche frita

Hoy os traemos uno de los postres tradicionales que más nos gustan en casa: la leche frita. Supongo que todos la conocéis pero, no podía faltar en nuestro recetario...¡nos encanta! :)

 

 

Ingredientes:

 

- 1/2 litro de leche

- 100 g- de azúcar

- 40 g. de maicena

- 1 trozo de cáscara de limón (sin la parte blanca)

- 1 ramita de canela (o una pizca de canela en polvo en su defecto)

- maicena y huevo batido para rebozar

- aceite de girasol (o aceite de oliva suave en su defecto)

- azúcar y canela en polvo para rebozar una vez frita

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Ponemos en un cazo al fuego la mitad de la leche junto con la cáscara de limón y la canela. Apartamos del fuego justo cuando empiece a hervir y tapamos con un plato para que la leche se coja bien el sabor del limón y la canela. Lo dejamos así unos 10-15 minutos.

 

Pasado este tiempo, retiramos las cáscara de limón y la canela y volvemos a poner la leche al fuego (a fuego medio). Añadimos el azúcar y removemos hasta que se disuelva.

 

Disolvemos la maicena en la lecha restante la añadimos al cazo. Removemos sin parar hasta que la mezcla esté bien espesa. La vertemos en un recipiente, preferiblemente cuadrado, y dejamos enfriar hasta que esté bien cuajada.

 

Pasado este tiempo, la cortamos en trozos cuadrados del tamaño que prefiramos, la pasamos por maicena y huevo y la freímos en abundante aceite hasta que esté doradita.

 

Retiramos los trozos de leche frita a una bandeja con papel de cocina en el fondo (para evitar el exceso de aceite) y, cuando ya no estén excesivamente calientes, los rebozamos en una mezcla de azúcar y canela. Dejamos enfriar antes de servir.

 

 

Galletas de canela con corazón de cristal

Hemos visto muchas veces este tipo de galletas por la red y, por fin, nos hemos animado a hacerlas. La verdad es que nos han gustado mucho porque, además de riquísimas, quedan muy muy bonitas...¡perfectas para regalar! :).

 

Nosotras les hemos dado un toque con la canela porque nos encanta, pero podéis añadirles otra cosa si preferís: ralladura de naranja o limón, un chorrito de ron, esencia de almendra...lo que más os guste.

 

Con estas cantidades, os dará para unas cuantas galletas, unas 30 aproximadamente...aunque, dependerá del tamaño del molde que uséis para cortarlas. Esperamos que os gusten y probéis a hacerlas en casa :)

 

 

Ingredientes:

 

- 150 g de mantequilla (a temperatura ambiente)

- 225 g. de harina (más extra para espolvorear la mesa)

- 80 g. de azúcar

- 1 yema de huevo

- 1 cucharadita de esencia de vainilla

- 2 cucharadita de canela (opcional)

- caramelos de colores (unos 20)

 

 

¿Cómo lo hacemos?

 

Ponemos en un bol el azúcar, la harina y la mantequilla y frotamos con los dedos hasta obtener miguitas.

 

Añadimos la yema, la vainilla y la canela y mezclamos y amasamos bien (mejor sobre la mesa enharinada) hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.

 

Envolvemos la masa en papel film y la dejamos en la nevera durante 1 hora para que tome consistencia.

 

Pasado este tiempo, ponemos la masa sobre la mesa enharinada y la estiramos con ayuda del rodillo hasta alcanzar un grosor de unos 5 milímetros, aproximadamente (en el horno, crecerán un poco).

 

Cortamos las galletas y las pasamos a una bandeja de horno con papel antiadherente. Con un cortador más pequeño (o simplemente, con un descorazonador), les hacemos el agujero del centro y colocamos dentro la mitad de un caramelo.

 

 

Las metemos al horno precalentado a 180ºC durante uno 10-12 minutos. Sacamos del horno y dejamos se enfríen, sin tocarlas ni moverlas, antes de retirarlas de la bandeja.

 

 

Pastel de pasta filo con arándanos, canela y pistachos.

¡Hola! Hoy os traemos una receta muy especial con la que participamos en el concurso del primer aniversario del blog Les receptes que m'agraden patrocinado por Castey. De todas las recetas que Pilar publicó en el 2014, nos hemos decantado por reproducir este rico pastel de pasta filo con alguna que otra modificación. Una receta, original, fácil y muy ruca que nos has sorprendido mucho :)

 

 

Ingredientes (para un molde de unos 20 cm.):

 

- 10 hojas de pasta filo

- 85 g. de mantequilla derretida

- 5 cucharadas de azúcar moreno

- 100 g. de pistachos troceados

- 100 g. de arándanos deshidratados troceados

- canela en polvo

- 300 ml de leche

- 60 ml. de nata líquida

- 200 g. de azúcar

- 3 huevos

- ralladura de 1/2 limón

- ralladura de 1/2 naranja

- trocitos de pistacho, arándanos y miel

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

En primer lugar, untamos con un poco de mantequilla el fondo y laterales de nuestro molde. Reservamos.

 

Tomamos una hoja de pasta filo y la pitamos con mantequilla derretida. Espolvoreamos con azúcar moreno, trocitos de pistacho y arándanos y una pizca de canela en polvo. Plegamos la hoja hasta obtener una tira larga y la enrollamos sobre sí misma hasta formar un "rosetón" y lo colocamos en el molde.

 

 

 

 

 

Repetimos el proceso con todas las hojas de pasta filo y metemos nuestros molde al horno precalentado a 180ºC durante 20-25 minutos.

 

Mientras, ponemos en un cazo la leche, la nata, la mitad del azúcar, una pizca de canela y la ralladura de naranja y limón. Lo llevamos al fuego hasta que empiece a hervir. En ese momento lo apartamos del fuego y dejamos que se enfríe.

 

En un bol ponemos los huevos con el resto del azúcar y batimos muy bien con las varillas hasta obtener una mezcla espumosa y, sin dejar de batir añadimos poco a poco nuestra mezcla de leche y nata.

 

Sacamos el molde del horno, vertemos la mezcla por encima de los rosetones de pasta filo y volvemos a meter al horno durante unos 30-40 minutos. Sacamos del horno, dejamos enfriar y decoramos con trocitos de pistacho, arándonos y unos hilos de miel.

 

Brazo gitano relleno de crema pastelera

Este es uno de nuestros postres favoritos. Es un postre muy tradicional, muy fácil y muy muy rico. Nosotras lo hemos rellenado con crema pastelera (casera, por supuesto), pero, podéis rellenarlo de lo que más os guste: nata montada, trufa, mermelada...incluso podéis ponerle trocitos de fruta.

 

 

Espero que os guste y probéis a hacerlo porque la base de bizcocho queda PERFECTA con esta receta: esponjosa y, muy importante, flexible. ¡Nunca se rompe al enrollar! :)

 

Ingredientes:

 

- 3 huevos

- 80 g. de azúcar

- 1 pizca de sal

- 75 g. de harina leudante (o 75 g. de harina + 1 cucharadita de levadura)

- 1 cucharadita de esencia de vainilla

- crema pastelera para rellenar (aquí tenéis la receta)

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Ponemos en un bol de cristal al baño María los huevos, con el azúcar y la sal. Batimos durante unos 8-10 minutos con las varillas eléctricas hasta que la mezcla blanquee y doble (e incluso triplique) su tamaño.

 

Retiramos el bol del fuego, añadimos la vainilla y seguimos batiendo un par de minutos  más hasta que la mezcla enfríe un poco.

 

Añadimos la harina junto con la levadura y mezclamos con la ayuda de una espátula  y con movimientos envolventes hasta que esté totalmente incorporada y no haya ningún grumo.

 

Vertemos la mezcla en la bandeja del horno, con papel antiadherente en el fondo, y extendemos la mezcla con ayuda de una espátula.

 

Metemos al horno precalentado a 200ºC durante 10-12 minutos o hasta que la superficie esté dorada y al pinchar con un palillo en el centro, éste salga limpio.

 

Sacamos del horno y desmoldamos, dándola la vuelta a nuestra plancha de bizcocho sobre otro trozo de papel de horno. Dejamos enfriar antes de rellenar con la crema.

 

Ponemos la crema (o el relleno que hayamos escogido) por toda la superficie de la plancha de bizcocho y enrollamos con cuidado. Colocamos en el plato de presentación, decoramos y dejamos enfriar en la nevera (mejor de un día para otro).

 

 

Bizcocho cebra de vainilla y chocolate

¡Hola! Hoy os traemos un bizcocho que, además de quedar muy bonito y original, tiene un sabor espectacular. Al combinarse la vainilla con el chocolate, queda ¡de vicio!. Para la masa, nosotras hemos seguido la receta del bizcocho de yogur, porque, además de ser nuestra favorita, tiene la textura perfecta para conseguir el dibujo de cebra al verterla en el molde.

 

Probad a hacerlo en casa porque ¡os encantará! :)

 

Ingredientes:

 

- 1 yogur natural

- 4 huevos

- 1 "yogur" de aceite de girasol

- 2 "yogures" de azúcar

- 3 "yogures" de harina

- 2 cucharaditas de esencia de vainilla

- 1 cucharada y media de cacao puro

- 1 sobre de levadura tipo Royal

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

En un bol amplio, ponemos el yogur, los huevos, el aceite, el azúcar y la vainilla y mezclamos muy bien con las varillas. Añadimos poco a poco la mezcla de harina con la levadura incorporada y seguimos batiendo hasta obtener una mezcla homogénea.

 

Dividimos la masa en dos partes iguales. Una la dejamos como está y a la otra, le añadimos el cacao y mezclamos bien.

 

Ponemos cada mezcla en un bolsita de plástico diferente a modo de manga pastelera y ya estamos listos para hacer nuestro dibujo cebra. Para ello: ponemos un poco de masa de vainilla en el centro del molde y, a continuación, justo en el centro de ese charco de vainilla, un poco de la masa de chocolate. La masa se irá extendiendo formando las líneas de diferente color, como si fuera una diana.

 

Repetimos el proceso hasta acabar con toda la masa, poniéndola siempre JUSTO EN EL CENTRO, del círculo anterior.

 

Metemos al horno precalentado a 180ºC durante unos 40 minutos, o hasta que al pinchar en el centro con un palillo, éste salga limpio.

 

 

Pastel libanés de almendra y naranja

Este año hemos tenido muchas almendras y las hemos aprovechado al máximo. Las últimas, las hemos usado para hacer este rico bizcocho de almendra y naranja. Esperamos que os guste :)

 

 

Ingredientes:

 

- 5 huevos

- 200 g. da almendra molida

- 250 g. de azúcar

- 2 naranjas

- 1 sobre de levadura tipo Royal

 

Para decorar: almendra troceada y 1 naranja en rodajas.

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

La vamos las naranjas y las ponemos a cocer enteras, cubiertas de agua, hasta que estén blanditas. Las pasamos al vaso de la batidora y las trituramos.

 

En un bol ponemos los huevos, el azúcar, la almendra y la levadura y batimos muy bien. Añadimos el puré de naranja y batimos hasta obtener una mezcla homogénea.

 

Vertemos la mezcla en un molde engrasado con mantequilla y papel de horno en el fondo, espolvoreamos con la almendra troceada y decoramos con las rodajas de naranja.

 

Metemos al horno precalentado a 180ºC durante unos 40 minutos, o hasta que al pinchar con un palillo en el centro, éste salga limpio. Sacamos del horno y dejamos enfriar completamente.

 

Roscón de Reyes. PASO A PASO

Llevamos dos años haciendo el roscón en casa y, con esta receta, cada vez queda más rico :). Si probáis a hacerlo en casa, no volveréis a comprarlo...¡seguro! La receta la vimos en el blog de MJ y para nosotras, es infalible.

 

Nosotras lo hemos rellenado de nata, pero también se puede rellenar de crema, de trufa...o no ponerle ningún relleno...y estará igual de rico.

 

Espero que os guste y, por favor, probad a hacerlo en casa :)

 

 

Ingredientes:

 

Para la masa madre:

 

- 130 g. de harina de fuerza

- 10 g. de levadura fresca

- 1 cucharadita de azúcar

- 70 g. de leche

 

Para la 2ª masa:

 

- 450 g. de harina

- 1 pizca de sal

- 70 g. de mantequilla blanda

- 60 g. de leche

- 20 g. de levadura fresca

- 2 huevos

- 120 g. de azúcar

- piel de una naranja (sin la parte blanca, para que no amargue)

- piel de un limón (sin la parte blanca, para que no amargue)

- 1 chorro de agua de azahar

- la masa madre

 

Para decorar:

 

- huevos batido

- frutas escarchadas

- azúcar con unas gotas de agua (para que no se queme en el horno)

 

 

¿Cómo lo hacemos?:

 

Ponemos en un bol los ingredientes de la masa madre, mezclamos y amasamos bien y formamos una bola. Ponemos la bola en un cuenco con agua templada y la dejamos ahí hasta que flote (unos 15 minutos, más o menos).

 

 

 

Trituramos en  el molinillo el azúcar de la segunda masa con la piel de naranja y limón. Ponemos esta mezcla junto con el resto de ingredientes y junto con la masa madre en un cuenco amplio. 

 

 

Amasamos con los ganchos de la batidora o con las propias manos hasta obtener una masa homogénea, formamos una bola y la ponemos en un bol. Cubrimos con papel film y dejamos reposar durante 4 horas en un lugar cálido.

 

 

 

Pasado este tiempo, ponemos la masa sobre la mesa y le quitamos el harina clavando el puño en el centro. Amasamos ligeramente y formamos una bola de nuevo.

 

 

Clavamos los dedos en el centro de nuestra bola y con nuestras propias manos, vamos dando forma al roscón.

 

 

 

Colocamos el roscón en la bandeja de horno, con papel antiadherente en el fondo y una lata o una taza redonda en el medio, cubrimos con un paño limpio y dejamos reposar otros 90 minutos.

 

 

Pasado este tiempo, pintamos suavemente el roscón con el huevo batido, colocamos encima las frutas y espolvoreamos con el azúcar humedecido.

 

 

Metemos en la parte baja del horno precalentado a 200ºC. A los 5 minutos, los bajamos a 180ºC y cocinamos durante otros 20-25 minutos (hasta que esté doradito).

 

 

Sacamos del horno y dejamos enfriar completamente antes de abrir y rellenar a nuestro gusto.