¡Hola de nuevo! Hoy os traemos un dulce muy especial que, según la persona que nos dio la receta, es muy común en las celebraciones judías. No sabemos su nombre exacto pero, esta especie de puritos son una delicia e ideales para acompañar el café o té de sobremesa :). Aunque no son para todos los días (por el aporte calórico de los ingredientes), merece la pena probarlos; además, la receta es muy sencilla y requiere muy pocos ingredientes.
Espero que os guste y os animéis a probarlo en casa; seguro que sorprenderéis a vuestros invitados :)
Ingredientes (para unos 24 puritos):
- 250 g. de almendra molida
- 125 g. de azúcar
- 1 huevo
- 6 hojas cuadradas de pasta filo
- 1 vaso y medio de miel
¿Cómo lo hacemos?:
En un bol ponemos la almendra molida, el azúcar y el huevo. Mezclamos hasta obtener una masa homogénea a la que fácilmente podemos dar forma con las manos.
Tomamos las hojas cuadras de pasta filo y las cortamos en cuatro triángulos. Si, como en nuestro caso, las hojas no fueran cuadradas, les cortamos el sobrante con ayuda de un cuchillo.
Colocamos sobre la mesa los triángulos de pasta filo con la punta hacia nosotros. Tomamos un pedacito de la mezcla de almendra y formamos un churrito.
Colocamos el churrito cerca de la punta del triángulo y enrollamos hacia arriba.
Cuando lleguemos casi al final, humedecemos con un poco de agua las esquinas y las metemos para dentro. Humedecemos el último borde para que se pegue bien y terminamos de enrollar. Repetimos el proceso hasta acabar con la mezcla de almendra.
Ponemos en un cazo la miel y calentamos hasta que rompa a hervir (momento en que bajaremos el fuego al mínimo). Mientras, ponemos al fuego abundante aceite en una sartén.
Cuando el aceite esté bien caliente, añadimos unos cuantos puritos y freímos hasta que estén bien dorados. Los sacamos de la sartén con ayuda de dos tenedores (para escurrir el exceso de aceite) y los metemos en el cazo con miel, donde los dejaremos el tiempo que tarde en freírse la siguiente tanda de puritos. Retiramos y dejamos reposar sobre papel de horno en una bandeja. Repetimos el proceso hasta acabar con todos los puritos y dejamos enfriar bien antes de servir.
Me encantan los dulces árabes, estan super ricos y seguro que esta receta no es una excepción.
ResponderEliminarMil besos
Madre mía que receta más original y vistosa nos traéis hoy!!! y con pasta filo!!! me encanta!!! os han quedado monísimos es ideal para sorprender a los invitados en la sobremesa acompañados de un té, ummmm... deliciosos!!! besotes.
ResponderEliminarTienen que estar super ricos!! Me gustan los dulces árabes mucho, con esa mezcla de almendra y miel. Un beso !!
ResponderEliminarTienen que estar muy ricos estos puritos!!! La mezcla de almendra y miel, es deliciosa. Me encantaron.
ResponderEliminarBesitos chicas!!
Estos puritos tienen que ser una delicia, pero son una bomba, hay que salir a correr después de comerse uno jeje. Un besote!
ResponderEliminarComo bien dices, no para todos los días, pero ¿ porqué no para un día especial?
ResponderEliminarNo podemos estar siempre pensando en calorías, algún capricho nos tenemos que dar de vez en cuando, jaja!
Un besito
Maria
Que ricos, tienen una pinta buenísima, asique no quiero imaginar lo buenos que tienen que estar! bss
ResponderEliminarUmmmmmmmmm me encantan y eso que no los he comido nunca , para no variar te han quedado divnisimooooooooos ,el paso a paso fantastico , esa foto del corte viendose el relleno es de lo mas tentadora que pena no poder llevarme un taper con unos pocos.
ResponderEliminarBicos mil y feliz finde wapa.
Muchas gracias por lo comentarios :). Os aseguro que estos puritos estaban DEMASIADO BUENOS: nada empalagosos ni grasientos y con el punto dulce ideal. Ya tenemos sustituto para los mazapanes estas Navidades :)
ResponderEliminarUauuuuu!!!! que maravilla! muchísimas gracias por darnos a conocer este maravilloso dulce. Tienen que estar buenísimos! y las calorías con no contarlas asusto arreglado jaja.
ResponderEliminarUn beso