Hola, ¿cómo va vuestro fin de semana? El nuestro ha comenzado de maravilla disfrutando de esta riquísima tarta de queso y mora que hoy os traemos :)
La receta es muy sencilla y muy parecida a la que utilizamos para esta otra tarta de queso y limón que os enseñamos hace un tiempo, se prepara en un momento y, lo mejor de todo, ¡sin tener que encender el horno!
Para acompañar, hemos aprovechado nuestra mermelada de mora casi recién hecha con una decoración, además, preciosa ¿o no? :) Vamos con la receta:
- 30 galletas
- 2 cucharadas de mantequilla o margarina
- 1 cucharadita de miel (opcional)
- 300 g. de queso crema (tipo Philadelphia)
- 500 ml. de nata líquida
- 4 cucharadas de azúcar
- 3 hojas de gelatina neutra
- 1 dedo de agua
- 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
- 4 cucharadas de mermelada de moras (o cualquier otro sabor)
- moras para decorar
¿Cómo lo hacemos?
Trituramos las galletas y las ponemos en un bol. Añadimos la mantequilla o margarina a temperatura ambiente y la miel. Mezclamos muy bien con las manos hasta obtener una masa. Cubrimos el fondo de nuestro molde con la mezcla de galleta, aplastamos bien y reservamos en la nevera.
Ponemos las hojas de gelatina en agua durante cinco minutos para que se hidraten. Ponemos al fuego un cazo con el dedo de agua y cuando empiece a hervir, añadimos las hojas de gelatina escurridas. Removemos muy bien con las varillas hasta que estén bien disueltas, retiramos del fuego y dejamos que se temple (muy importante).
En un bol amplio ponemos el queso crema, el azúcar, la esencia de vainilla y la nata. Batimos durante unos minutos hasta que la mezcla esté semimontada, añadimos poco a poco la gelatina ya templada y seguimos batiendo durante unos segundo más (no es necesario que esté totalmente montada). Vertemos sobre la base de galleta, la repartimos bien y alisamos un poco con una espátula o cuchara.
Ponemos la mermelada en una bolsita pequeña a modo de manga pastelera, le hacemos un agujero fino, la repartimos por toda la superficie y movemos la mezcla con un palito de brocheta o un tenedor para formar el dibujo. Dejamos en la nevera durante unas cuantas horas (o mejor, de un día para otro). Desmoldamos, decoramos con unas moras frescas y servimos.
Definitivamente tengo que probar a hacerla.
ResponderEliminarSoy una amante 100% de las tartas de queso, y esta tiene una pintaza que puf...
¡Me encanta chicas!
Un beso, Nuri :)
Las tartas de queso tienen muchas versiones ,aprovechando que es época de moras se nos ocurrió esta. Nos gustó mucho a todos. Un abrazo.
EliminarUmmm, qué delicia de tarta, con la mermelada casera te ha quedado de lujo. Perfecto para empezar bien el fin de semana!! Un besazo
ResponderEliminarLas tartas caseras son mucho más naturales que las que compramos en el hiper.
EliminarHay que aprovechar la fruta de temporada . Un beso.
Impresionante esta este cheesecake, no soy nada de moras y a un a si un trozo de esta tarta no lo perdonaría, está con una pintaza y el corte me tiene embobada....Bess
ResponderEliminarLo mismo puede ser mermelada de moras o de fresa o de frambuesa, la combinación del queso con fruta resulta buenísima. Un abrazo.
ResponderEliminarEsa receta no sirve ,le hace falta azucar y no corta
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