Patatas 3 salsas: brava, ali-oli y mostaza/miel

¡Hola! ¿Os apetece una tapita de patatas? :) Aunque nosotras no solemos hacerlas en casa, porque fritas (¡por desgracia!) no es la forma más sana de comerlas, de en vez en cuando nos damos el gusto y lo hacemos por todo lo alto con una buena salsa casera.

 

Para que vosotr@S también lo hagáis así de bien, hoy no os traemos una sino, ¡3 salsa diferentes y deliciosas! Esperamos que os gusten tanto como a nosotras. Vamos con la receta:

 

 

Ingredientes:

 

Para la salsa ali-oli: 1 huevo, 1 diente de ajo, 1 pizca de sal, 1 buen chorro de aceite y 1 chorrito de vinagre.

 

Para la salsa brava: 1/4 de cebolla, 2 dientes de ajo, 1 ramita de perejil, 1 cucharadita de harina, 2 vasos de salsa de tomate, 2 cayenas pequeñas, 1 pizca de sal y 1 chorrito de aceite.

 

Para la salsa de mostaza: 3 cucharas de vinagre, 1 cucharada de mostaza, 1/2 cucharada de miel, 1 buen chorro de aceite, 1 pizca de sal, 1 pizca de pimienta negra y 1 pizca de hierbas provenzales.

 

 

¿Cómo lo hacemos?

 

Para la salsa ali-oli: ponemos en el vaso de la batidora el huevo, el ajo y la sal. Trituramos un poco y, sin dejar de batir con la batidora pegada al fondo del vaso, añadimos poco a poco el aceite (hasta que veamos que la mezcla se liga). Levantamos la batidora y terminamos de mezclar. Añadimos un chorrito de vinagre, mezclamos bien ¡y listo!

 

Para la salsa brava: ponemos en una sartén un chorrito de aceite, añadimos la cebolla trocada, los ajos fileteados, un poco de perejil y una pizca de sal y sofreímos hasta que la cebolla esté bien pochada. Ponemos la cucharadita de harina, rehogamos durante unos segundos para que se cocine y añadimos la salsa de tomate y las cayenas picadas. Dejamos que se cocine durante un par de minutos, trituramos con la batidora y volvemos a poner al fuego para que la salsa se reduzca hasta conseguir el espesor deseado.

 

Para la salsa de mostaza: ponemos en el vaso de la batidora el vinagre, la mostaza, la miel, una pizca de sal y pimienta y las hierbas provenzales. Batimos y, sin levantar la batidora del fondo del vaso, vamos añadiendo poco a poco el aceite (hasta que veamos que la mezcla se liga). Levantamos la batidora, terminamos de mezclar ¡y ya está!