Tarta de queso y mousse de chocolate

¡Hola! Hoy os traigo la tarta que mi madre ha elegido para celebrar este día tan especial: una tarta de queso y mousse de chocolate DELICIOSA. Si sois chocolateros como nosotras os va a encantar y si no...¡seguro que también! :)

 

Es una tarta contundente, la verdad, pero la combinación del queso con el chocolate y de las diferentes texturas de la tarta hacen que, en mi opinión, sea una tarta ¡de 10!.

 

Aunque tiene varios pasos, veréis que la elaboración es en realidad muy sencilla así que, no hay excusa para no hacerla. Vamos con la receta:

 

Ingredientes:

 

- 6 claras de huevo + 1 huevo entero

- 130 g. de azúcar + 1 cucharada

- 200 g. de chocolate negro

- 330 ml. de nata líquida

- 30 g. de harina

- 300 g. de queso crema (tipo Philadelphia)

- 1 cucharadita de levadura tipo Royal

- 1 cucharadita de esencia de vainilla

- 1 pizca de sal

 

¿Cómo lo hacemos?

 

Para la base: ponemos en un cazo a fuego medio 50 ml. de nata y, sin dejar de remover, derretimos en ella 65 g. de chocolate negro; retiramos del fuego y dejamos que la mezcla se temple.

 

Montamos a punto de nieve 120 g. de clara de huevo (unas 4 claras) con 60 g. de azúcar. Añadimos el chocolate y lo incorporamos con una espátula con movimientos envolventes. Añadimos 30 g. de harina junto con 1 cucharadita de levadura Royal y la incorporamos de la misma manera. Cuando la mezcla esté homogénea, la vertemos en el molde (al que habremos puesto papel antiadherente en el fondo) y lo metemos al horno precalentado a 170ºC unos 20 minutos o hasta que al pinchar en el centro con un palillo éste salga limpio.

 

Sacamos del horno y dejamos enfriar completamente antes de poner encima la siguiente capa. Si el bizcocho a subido demasiado (aunque bajará un poco al enfriar) lo aplastamos un poco hasta conseguir el grosor deseado.

 

Para la tarta de queso: con unas varillas, batimos el queso crema hasta que esté cremoso. Añadimos 40 g. de azúcar, 1/2 cucharadita de vainilla, un pizca de sal, 1 huevo y mezclamos muy bien. Añadimos poco a poco 90 ml. de nata y mezclamos justo hasta que todo esté bien incorporado. Vertemos la mezcla sobre la base de chocolate que ya habrá enfriado.

 

Forramos el molde con un poco de papel de aluminio y lo ponemos en una bandeja de horno. Vertemos agua en la bandeja hasta que llegue a la mitad de nuestro molde y la metemos en el horno a 160ºC unos 40-50 minutos o hasta que el centro de nuestra capa de queso esté bien cuajado. Sacamos del horno y dejamos enfriar completamente antes de poner la siguiente capa encima.

 

Para la mousse de chocolate: en un cazo a fuego medio derretimos 90 g. de chocolate negro con 30 g. de mantequilla; retiramos del fuego y dejamos que la mezcla se temple.

 

En un bol montamos a punto de nieve 2 claras de huevo con 30 g. de azúcar; en otro bol, montamos a punto de nieve 120 ml. de nata con 1 cucharada de azúcar y 1/2 cucharadita de esencia de vainilla. Unimos ambas mezclas y las incorporamos con una espátula con movimientos envolventes. Añadimos poco a poco el chocolate ya templado y lo incorporamos de nuevo con movimientos envolventes. Vertemos la mezcla sobre la capa de queso de nuestra tarta y alisamos la superficie. Metemos a la nevera unas 3 horas.

 

Para la ganache de chocolate: en un cazo a fuego medio ponemos 70 ml. de nata y, sin dejar de remover, derretimos en ella 45 g. de chocolate negro; retiramos del fuego y dejamos que la mezcla se temple. Sacamos nuestra tarta de la nevera y vertemos sobre la capa de mousse nuestra ganache de chocolate. Metemos de nuevo a la nevera y la dejamos enfriar otras 3 horas mínimo (aunque, sabrá mucho mejor si la dejamos de un día para otro).

 

Al día siguiente la desmoldamos con cuidado y la decoramos al gusto; en nuestro caso, con detalles de chocolate negro y bolitas de 3 chocolates.

 

 NOTAS

 

* Esta es una adaptación de la receta que vimos en el blog L'exquisit