Ya casi ha llegado, aún falta un poquito, pero hay que estar preparados. Hay muchas cosas por hacer para poder ponernos morados en Navidad: bombones, trufas, roscones, pannettones... y todo eso haremos para poder enseñaros en el blog, para que os de tiempo a probar en casa si os apetece.
Para empezar, las galletitas de jengibre que vemos en todas las clásicas películas navideñas americanas :). Nunca antes las habíamos hecho y, definitivamente, nos han ENCANTADO. Nos hemos animado, además, con la casita de galleta tan típica también y que siempre me ha fascinado (sin plantillas ni moldes especiales) pero, os aviso, si la hacéis, os dolerá mucho comérosla...jajaja
Nosotras utilizamos la mitad de la masa para hacer galletas (muchísimas) y la otra mitad, para hacer la casita; así que, si os parece mucho, podéis partir la receta por la mitad y listo (os seguirán saliendo un montón de galletas).
Ingredientes:
- 550 g. de harina
- 200 g. de azúcar
- 100 ml. de agua
- 135 g. de miel
- 200 g. de mantequilla un poco derretida
- 1 cucharadita de canela
- 1 cucharadita de jengibre en polvo
- 1 cucharadita de cacao puro
- 1 pizca de nuez moscada
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de bicarbonato
- glasa real para decorar (aquí tenéis la receta)
¿Cómo lo hacemos?:
Nosotras utilizamos la mitad de la masa para hacer galletas (muchísimas) y la otra mitad, para hacer la casita; así que, si os parece mucho, podéis partir la receta por la mitad y listo (os seguirán saliendo un montón de galletas).
Ingredientes:
- 550 g. de harina
- 200 g. de azúcar
- 100 ml. de agua
- 135 g. de miel
- 200 g. de mantequilla un poco derretida
- 1 cucharadita de canela
- 1 cucharadita de jengibre en polvo
- 1 cucharadita de cacao puro
- 1 pizca de nuez moscada
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de bicarbonato
- glasa real para decorar (aquí tenéis la receta)
¿Cómo lo hacemos?:
Ponemos en un cazo al fuego el agua, el azúcar, la miel, la canela, el jengibre, el cacao y la nuez moscada. Removemos con las varillas para que todo quede bien mezclado y dejamos que hierva un poco a fuego medio. Apartamos del fuego y añadimos la mantequilla. Removemos de nuevo con las varillas hasta obtener una mezcla homogénea, la pasamos a un bol amplio y dejamos que se enfríe por completo.
Una vez fría la mezcla anterior, ponemos en otro bol la harina, la sal y el bicarbonato y mezclamos muy bien. Cogemos el bol con nuestra mezcla líquida y unas varillas eléctricas (o una cuchara en su defecto) y, poco a poco, vamos incorporando la harina. Echamos un par de cucharadas de cada vez y batimos bien; así, hasta acabar con toda la harina. Obtendremos una masa muy espesa que debemos meter en una bolsita de plástico y dejar enfriar en la nevera durante toda la noche (para que coja consistencia)
Al día siguiente, podremos estirar la masa sin problemas. Eso sí, es importante que la parte de masa que no vayamos a estirar en ese momento, la dejemos en la nevera para que se conserve bien fría.
Para dar forma a las galletas, extendemos la masa con ayuda del rodillo hasta obtener un grosor de medio centímetro aproximadamente (o incluso un poco menos) y cortamos con nuestros cortapastas. Pasamos a una bandeja de horno con papel antiadherente y metemos al horno precalentado a 180ºC durante unos 7 minutos. Dependerá un poco del tamaño de la galleta (si son más grandes, las tendremos unos 10 minutos). Cuando estén completamente frías, las decoramos con glasa al gusto y dejamos secar antes de guardarlas.
Para la casita, nosotras utilizamos unas plantillas totalmente caseras aunque, podéis imprimir estas de aquí si os resulta más sencillo. Una vez cortadas las piezas de nuestra casita, las pasamos a la bandeja del horno y horneamos también a 180ºC; en este caso, durante unos 10 aproximadamente.
Cuando estén frías las piezas, las unimos con un poco de chocolate derretido templado. Primero pegamos las paredes, aguantamos un poco sujetando con las manos y dejamos enfriar en la nevera. Una vez enfriado el chocolate, pegamos el tejado. Aguantamos otra vez unos segunditos con las manos y dejamos enfriar en la nevera de nuevo. Cuando el chocolate haya enfriado, la casita estará perfectamente pegada. Finalmente, decoramos con la glasa real al gusto y añadimos todos los detalles que se nos ocurran (incluso con lacasitos o gominolas) y dejamos secar.
NOTA: Estas galletas no deben quedar especialmente doradas. Como depende un poco del tamaño de las galletas y del horno (que cada uno es un mundo), podéis probar con una primera tanda y, en función de cómo salgan, aumentar o bajar un poco el tiempo de horno.
Por favorrrrrr qué pasada!!! qué casita de jengibre más mona!!! os han quedado tanto la casa, como las galletas PRECIOSAS!! y tienen que estar riquísimas, enhorabuena por el gran trabajo!! besotes
ResponderEliminarElena: Unas Gotas de Imaginación
Que currazo tiene esta casita!! madre de dios, os ha quedado fabulosa, que bonita si la ve mi hija la armamos, y la verdad yo ni loca la hago me parece un trabajón, viendo el resultado me pasaría enseguida,y es que esta de escaparate....Bess
ResponderEliminarQué preciosidad de casita!!! Qué bonita y rica os ha quedado. La verdad es que daría una pena comérsela, está de exposición!!!. Un trabajo estupendo, sois unas artistas.
ResponderEliminarBesos chicas!!!
Que preciosa casita! Me encanta lo bien que te ha quedado! Un beso guapa!
ResponderEliminarLes receptes que m'agraden
Hola chicas, yo me comería una de la cajita ,pero la casita seria incapaz de romperla ,ahora que si la rompe otro, yo sigo ehh.
ResponderEliminarLas galletas son facilitas y me atrevo, pero la casita incapacitada total, es una monada.
Un beso y buen martes.
Lourdes
Os ha quedado una estupenda casa y seguro que deliciosa! un gran trabajo! bss
ResponderEliminar¡La navidad ha llegado a nuestros blogs! Todas andamos con el chip navideño conectado y si no estamos publicando ya alguna receta navideña, sí que andamos pensándola.
ResponderEliminarMe han gustado mucho vuestras galletas de jengibre ¡y la casita es un amor!
¡Besos mil!
http://losdulcessecretosdecuca.blogspot.com.es/
UNa monada , da pena comerla , tiene que estar deliciosa!! Un beso
ResponderEliminar¡Muchas gracias por vuestros comentarios! Estas galletas de jengibre han pasado a ser unas de nuestras favoritas y, en cuanto a la casita...os juro que es muchísimo más fácil de lo que parece. El chocolate fundido es un pegamento genial para estas cosas :)
ResponderEliminarQué preciosidad y vaya cosa rica. Me quedo por vuestra cocina. Un abrazo, Clara.
ResponderEliminarQue bonitas son tanto las galletas como la casa, ufff estoy deseando hacerlas!!
ResponderEliminarUn beso
Chicas, esa casita de galletas de jengibre les ha quedado preciosa. Las galletas ya de por sí son deliciosas y al haber armado con ellas la casita, más bonita aún. Da pena comerlas... ¡Hermosa! :)
ResponderEliminarYa veo que te estas preparando para las proximas fiestas , que preciosidad y que ricura , una maravilla
ResponderEliminarbesinos
Tienes razón no queda nada! que galletas tan bonitas!! y tienen que estar muy ricas, gracias por tu visita asi he podido conocerte y me quedo por aqui, bicos
ResponderEliminaruna preciosidad de casita , y las galletas seguro que estan buenisimas
ResponderEliminarbss