Conservas caseras: SALSA DE TOMATE

Hace unos días os enseñamos cómo hacemos nosotras el pisto y hoy, siguiendo con esa serie de conservas de la que os hablábamos, os damos nuestra receta para hacer y conservar salsa de tomate casera.

 

Nosotras solemos hacerla en grandes cantidades porque son muchos los tarros que conservamos (¡tantos, que este año nos va a costar trabajo encontrar donde guardarlos!) pero, aquí os daremos los ingredientes para unos 8 solamente. Espero que os guste y probéis a hacerla porque nos servirá para tantos platos: pasta, arroz, pizza, guisos, salsa brava... :) 

 

 

Ingredientes (para unos 8 tarros medianos):

 

- 10 kg. de tomates bien maduros

- 1/2 cebolla

- 1 pimiento bien rojo

- 3 dientes de ajo

- perejil

- aceite

- azúcar

- sal

 

¿Cómo lo hacemos?

 

En primer lugar, pelamos y troceamos los tomates, exprimiéndolos un poco para evitar el exceso de agua y conseguir que la salsa espese antes. Antes, lo hacíamos a mano después de meter los tomates en agua bien caliente para que la piel se levantara sin desperdiciar nada de carne; ahora, lo hacemos con esta especie de trituradora que pela y trocea al mismo tiempo. Os la recomiendo, porque facilita mucho la tarea :)

 

 

Por otra parte, en un asador grande (como el de la foto) ponemos un poco de aceite y pochamos en él la cebolla con los ajos, el perejil y el pimiento. Cuando todo esté blandito lo sacamos al vaso de la batidora, lo trituramos bien y lo volvemos a poner en el asador.

 

Añadimos los tomates troceados y, removiendo de vez en cuando, dejamos que todo se cocine muy bien hasta obtener una salsa más bien espesa. Rectificamos de sal, añadimos una pizca de azúcar para corregir la acidez del tomate ¡y listo!

 

Para conservarla, como siempre, rellenamos nuestros tarros previamente esterilizados, cerramos bien y cocemos en agua hirviendo durante 20 minutos.